Desde muy pequeños es necesario que adquieran hábitos correctos de higiene bucodental. Es muy importante que con el tiempo también sean conscientes de por qué es importante y cuáles pueden ser los resultados de desatender el cuidado de su boca a corto y largo plazo.
A diario, los padres nos preguntan cuál es la edad ideal para enseñar a sus hijos a lavarse los dientes. «La higiene de los dientes debe empezar desde el momento en que aparecen en la boca de los más pequeños» responde la Dra. Carmen Soto López.
Cómo empezar…
Cuando son bebés recomendamos limpiar los primeros dientes de leche después de las comidas con una gasa o cepillo pediátrico ultrasuave, y no dejar al bebé acostado con el biberón (salvo que contenga agua).
Cuando son más mayores (1-2 años) se recomienda dejar que el niño juegue durante un minuto con el cepillo. Después el adulto debe ser quien realice la higiene dental durante otro minuto, hasta que el niño posea la habilidad para hacerlo por sí mismo (aproximadamente a los 8 años)».
Es importante hacerlo desde pequeño para que el niño y/o bebe se acostumbre a una limpieza dental suave creando una rutina diaria de cuidados que lo acompañarán durante muchos años.
Necesidades para la higiene dental en niños
Cepillo: En el momento que aparezca un diente, los padres ayudarán al niño dos veces al día con una pequeña cantidad de pasta dental con flúor en un cepillo de dientes especial para la edad del niño y/o bebé.
Pasta dental: Es importante acompañar con una pasta o gel dental que contenga flúor. Las cantidades variarán en función de la edad, puesto que ayuda a fortalecer el esmalte y disminuir las probabilidades de desarrollar caries. Por ejemplo, si se trata de un bebe la cantidad de la pasta dental tendrá que ser del tamaño de un grano de arroz.
Sedas y cintas dentales: Se recomienda introducirlas a partir de los 6 años, cuando los dientes de los niños empiezan a tocarse unos con otros. A partir de los 8 y 10 años serán capaces de hacerlo por su propio pie sin la presencia de un adulto.
Truco para introducir la higiene dental desde pequeños
Jugar, jugar y jugar. Conseguir asociar esta rutina a algo positivo significa salir ganando todos. Por ejemplo, es bueno hacer uso de los juguetes, contarles mediante un cuento por qué es importante lavarse los dientes son buenas maneras de conseguirlo.